Cuando se está bajo estrés, el cuerpo activa una serie de respuestas que pueden afectar el equilibrio hormonal, el estado de ánimo e incluso la salud del cerebro y del metabolismo. Cada vez más estudios muestran que una buena nutrición puede ayudar al cuerpo a sobrellevar mejor estos momentos, y entre los nutrientes más importantes se destacan las vitaminas del complejo B y el magnesio.
El cerebro es uno de los órganos que más energía requiere y es vulnerable a períodos de estrés si no recibe los nutrientes adecuados. Las vitaminas del complejo B y el magnesio trabajan en conjunto para garantizar un buen funcionamiento del sistema nervioso.
¿Qué es el complejo B y por qué es importante?
El complejo B está formado por ocho vitaminas esenciales que participan en muchas funciones del cuerpo. A excepción de la vitamina B12, estas vitaminas no se almacenan en grandes cantidades, por lo que es necesario consumirlas a diario.
Entre ellas, la vitamina B6 se ha estudiado por su relación con el bienestar emocional. Esta vitamina, en su forma activa (llamada P5P), ayuda al cuerpo a producir neurotransmisores (químicos cerebrarles) como Serotonina y GABA, fundamentales para mantener la calma, dormir bien y sentirnos equilibrados emocionalmente. Además, ayuda a convertir la serotonina en melatonina, una hormona clave para el sueño.
Se ha visto que la Vitamina B6 mejora la absorción del Magnesio, un mineral que calma, ayuda a relajar los músculos y puede contribuir a reducir la ansiedad.
¿Y qué pasa con otras vitaminas B?
Otras vitaminas del complejo B, como la B12, el folato y la riboflavina, también juegan un papel importante en el equilibrio emocional. Estas vitaminas participan en procesos que ayudan al cuerpo a deshacerse de una sustancia llamada homocisteína, que cuando se acumula en exceso, se ha asociado con deterioro cognitivo y bajo estado de ánimo.
Una revisión que analizó varios estudios con casi mil personas encontró que tomar Vitaminas del complejo B no solo aumentó los niveles de estas vitaminas en sangre, sino que también ayudó a reducir el estrés y la homocisteína, en comparación con quienes tomaban un placebo.
¿Qué dice la ciencia?
Un estudio realizado con personas que atravesaban niveles altos de estrés mostró que tomar Magnesio (300 mg) junto con Vitamina B6 (30 mg) durante 8 semanas redujo significativamente los síntomas de estrés, especialmente cuando se usaron ambos nutrientes combinados. También, un estudio realizado luego de una catástrofe natural, demostró que las personas que tomaban suplementos con complejo B o multivitamínicos con minerales, reportaron menos estrés y ansiedad. Como este, se han hecho análisis incluso más amplios en los que se concluye que las vitaminas B ayudaron a reducir el estrés percibido y mejoraron el estado de ánimo en personas con síntomas leves.
En resumen
Las vitaminas del complejo B y el magnesio son nutrientes esenciales que ayudan al cerebro y al cuerpo a manejar mejor el estrés. Aunque aún se siguen investigando las mejores formas de utilizarlos como parte de un tratamiento, la evidencia sugiere que pueden ser una herramienta útil para apoyar la salud mental, especialmente en personas que están atravesando momentos de alta demanda emocional.
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